Sobre la GriterÃa Chiquita en León, Nicaragua
|La GriterÃa Chiquita se desarrolla en conmemoración a la peregrinación que hacen los leoneses en 1947, dirigida por monseñor Augusto Oviedo y Reyes, para rogar a la Virgen que detuviera la quinta erupción volcánica del Cerro Negro.»
La celebración fue un compromiso adquirido por el obispo, monseñor Isidro Augusto Oviedo y Reyes, cuando entre los meses de julio y agosto de 1947 ocurrÃa la erupción del volcán Cerro Negro.
Nicaragua es un pueblo mariano por excelencia, muy devoto a la Inmaculada Concepción. La GriterÃa, celebrada en vÃsperas de esta solemnidad, la noche del 7 de diciembre, que es un ejemplo de ese amor inmaculista, dicha celebración se remonta desde 1857. Pero existe también la GriterÃa penitencial, o chiquita, celebrada en León desde 1947.
Debido a las constantes erupciones del volcán Cerro negro, y la continua expulsión de arena del coloso, amenazaban con destruir a la ciudad por completo, los techos se derrumbaban, las cosechas se perdÃan, y la incertidumbre, la zozobra reinaban en estas tierras.
Por tal razón, el obispo de aquél entonces, Mons. Isidoro Oviedo y Reyes, convoca al pueblo de León a elevar un altar a Nuestra Señora, en rotativa para que cesen las erupciones, a lo que el pueblo fiel atiende dicha petición.
Fue asÃ, que un 14 de agosto, en vÃsperas de la Asunción de MarÃa, el volcán dejó de hacer erupción, prodigio que desde entonces se agradece a la SantÃsima virgen, con viva voz gritando .